La G6 es una de las máquinas mejor estudiadas y diseñadas dentro del mundo de la bicicleta y llama la atención el importante trabajo de ingeniería que BH ha ejecutado en cada una de las partes de este modelo. Así, lo que en otras bicicletas es una notable mejoría, en la G6 hay aspectos que se dan por sentados. Es el caso de su cuadro monocasco fabricado en carbono bajo la técnica de vaciado interior evitando la creación de imperfecciones en el material. Además, esta técnica permite aplicar mayores densidades en las zonas donde la presión es mayor y aligerar las que no sufren tanto durante el recorrido. El resultado es un cuadro ligero, aerodinámico y muy absorbente de tan solo 840 gr. de peso en talla M.

Personalidad marcada

¿Quién dijo que una bici no tiene personalidad? Y no sólo eso ya que la G6 tienen un carácter muy marcado. Es una pieza rápida, rígida, ágil y con capacidad de respuesta. Sus reacciones son estudiadas y no deja espacio a la improvisación.

Su estructura deja entrever algunos puntos clave para su éxito: dirección cónica, cables guiados por el interior del cuadro, horquilla más aerodinámica, pedalier sobredimensionado, triángulo trasero más corto, nuevo diseño de la tija de sillín. Estos factores hacen que el centro de gravedad se sitúe en una posición más baja lo cual facilita la maniobrabilidad; es lo que se conoce como geometría sloping.

La horquilla ha sido moldeada en una sola pieza consiguiendo además un ajuste perfecto con el cuadro. Además, la dirección cónica cuya sección diagonal ha sido reducida más de un 11% logra una mayor eficiencia y menor resistencia al aire. La caja de pedalier ha sido también ensanchada hasta los 86.5mm incrementando rigidez y resistencia. Esto deriva en unos tubos diagonales inferiores de hasta 80m de diámetro. El resultado en conjunto es una absoluta rigidez lateral y una mayor estabilidad para el ciclista.