Julie Bresset logró el pasado fin de semana su tercera victoria en la Copa del Mundo de XC esta temporada en Windham. “Una dura lucha y una gran victoria, ¡increíble!”, en palabras de la biker del BH Suntour – Peisey Vallandy, que llegaba a la cita estadounidense tras una semana complicada por la caída en Mont St. Anne.

“Después de la agotadora carrera en Canadá la recuperación fue difícil, ya que tenía el cuerpo dolorido por la caída, que también supuso un golpe en la moral. Sin embargo, me mantuve centrada en Windham, donde quería hacer una buena carrera y, sobre todo, divertirme”, escribe la corredora en su blog.

“Este circuito era mucho menos exigente que el de Canadá, con alguna que otra dificultad técnica, y aunque me gusta cuando los circuitos son comprometidos, este me venía muy bien dado mi estado físico”, analiza.

La carrera se convirtió enseguida en un duelo entre Bresset y Pendrel. “Tras una buena salida me pego a la rueda de Catharine Pendrel, que había impuesto un ritmo alto. Abrimos hueco respecto al resto de corredoras, y empiezan los ataques de Catharine, difíciles de aguantar pero no me despegué de su rueda. Los últimos dos kilómetros eran de perfil más favorable, así que tenía que aprovecharlos para pasarla. En la última vuelta, en la que siempre es más intensa la guerra física, pude hacerlo -después me enteré que tuvo problemas mecánicos-. Estaba muy concentrada y a 100 metros de la meta me di cuenta de que tenía la suficiente ventaja para entrar con calma y saborear los últimos metros”, recuerda.

Offenburg, Dalby Forest y ahora Windham… “Estoy muy contenta con esta tercera victoria en la Copa del Mundo y con mantener el liderato de la general” concluye la biker, que ya prepara en Méribel el campeonato de Francia.